Servicio Internacional de Música y Canto
Los hermanos del Servicio Internacional de Música y Canto, tenemos que ser los primeros en llegar al encuentro de la oración, para arreglar todo lo que sea necesario como: micros, sillas, afinar los instrumentos, etc.
Como hermanos llamados a este servicio, tenemos que dar testimonio de lo que anunciamos.
Cuando animamos la oración carismática o la Santa misa, debemos:
- Estar muy atentos y seguir el curso de la oración.
- Estar unidos y en comunión con los Responsables del Pastoral.
- Estar listos en el momento preciso para realizar un canto determinado de invocación, sanación, liberación, etc.
El servicio del canto está formado por hermanos que ya viven la experiencia de oración carismática y con al menos dos personas que lo conducen, pero sin ser líderes.
Son elegidos por los responsables del Pastoral, a través de un discernimiento hecho en oración y es dado a los que:
- Han madurado en la fe y viven este camino en la Comunidad Jesús Resucitado.
- Son personas equilibradas y de oración.
- Reconocidas por su carisma de comunión con los demás.
Cada cosa que se haga en el servicio de canto, tiene que ser sometido a las decisiones de los Responsables que actúan por el bien de toda la Comunidad.
El número de hermanos que forman parte del servicio de canto, no es un número cerrado, está disponible para acoger a todos los hermanos que Dios quiera mandar. Ayudémoslos con amor y paciencia a crecer en el carisma, sin pasar por encima de ellos, poniendo en evidencia nuestras cualidades. También en esto los Responsables del Pastoral, estarán cuidando que se cumpla.
Como servicio de canto se pueden encontrar según su disponibilidad de tiempo por el trabajo, el estudio, la familia; para hacer el ensayo en un día diferente o un tiempo antes de la oración comunitaria.